27.4.10

Antología de citas cortas (parte cuatro, creo)

Bueno, el 2009 terminó raro.

Mi situación amorosa no se había estabilizado mucho, de hecho, casi nada. Con un portazo había cerrado el celular después de largos minutos a la espera de una explicación inexistente. Claro. No había más que entender, y decidí putear antes de que termine el año.

Resulta que unos días antes de irme de vacaciones, me agrega M. al FB y teníamos a J. como amiga en común, con lo cual pensé que era amigo de la escuela de música o algo... ¡Qué ilusa! A veces me sorprende lo ingenua que puedo llegar a ser.

Chat que va, chat que viene... teníamos bastantes cosas en común, con lo cual decidimos juntarnos a ver qué onda.

(PARÉNTESIS: No hay nada que me averguence más en esta vida es responder de dónde lo conocí.)

Nos juntamos en Paseo del Sol, si... medio pelo, pero era lunes y yo tenía cosas que hacer. La cuestión es que nos cagamos de risa, chapamos, él un caballero y yo una dama. It was a good date. Todo estuvo en su lugar, pero yo (gataflora) no estaba muy convencida (de hecho todavía sigo buscando "eso" que me convenza), pero decidí darle una oportunidad, total... una mancha más al tigre.

Quedamos en volvernos a ver. Me manda una invitación un día para ir a ver a su banda (no puede ser que me gusten siempre los rockeritos cancheros esos que no se si son buena gente y no sabés muy bien qué hacer la puta que lo parió). Obviamente, fui con mis backup dancers y el pibe se lució... digamos que su banda no me voló la cabeza, pero me terminó de gustar.

Termina el show y C. me gerencia la situación: terminar en el Alamo. Ok. M. se había ido con su now b-friend, y el resto decidimos ir a cenar algo primero al mac. Luego de cenar (panza llena, corazón contento), arrancamooooooooo' y nadie sabía dónde quedaba éste bendito lugar, por ende llamammos a M. que tiene muuuuuuuuuuuuucha noche encima, y finalmente lo ubicamos.

Apago el cigarrillo.
Entramos.
"Chicas, una entra gratis" (impecable)
Vamos straight to the bar.

Obvio que la estrategia de "te ignoro y me voy a buscar un trago" funciona. (Una después reflexiona sobre las estrategias inconcientes que, tanto hombres como mujeres, aplicamos a la hora de conquistar, ¿no?) Se acerca, el típico "hola, ¿qué tal? ¿cómo estás?" y bueno, todo salió smooooothly. Hasta que, de golpe, nos echan del bar porque un idiota le pega a una mina (nah, de otro planeta), así que otra vez afuera y pienso qué carajo hago... me cagaron la noche... C. me pregunta si estoy bien y yo le digo que sí, que vaya, que de acá en más me arreglo sóla.

Bueh.

Un eufemismo.

Yo me pregunto por qué me pasan estas cosas:

La estabamos pasando bien, fuimos a bajonearla a un BK, nos quedamos despiertos hasta que se despertó la ciudad, y tiene que preguntarme: "¿Vos sos de tener sexo casual?" ¿QUÉ ES ESA PREGUNTA? Si le digo que sí... ¿soy una prostituta?, pero si le digo que no... ¿qué onda?, AMOR, eso no se le pregunta a una dama... ¿Sabés por qué? PORQUE UNA DAMA NO TIENE MEMORIA.

Me la juego por lo seguro... le digo que no. ¡Para qué! Empezó con un discurso del estilo "No, porque yo... y vos.. y me gustás y bueno... quiero que sea especial" ¡Ay! ¡Qué nerviosa que me ponés! Además, ni que estuvieramos muy enganchados chabón! Esto no es amor.

TAXI!

Y el muy descarado me dice en la puerta de mi casa: "No, porque yo en realidad estaba buscando a otra mina y pensé que vos eras ella" Ah no! Yo a vos te tengo que dejar sin día del padre, después de haberme hecho fumar la historia de tu vida, lo mínimo que pedía era que me digas algo lindo y me dejes ir a dormir.

Obvio, uno más para agregar en la lista. (o, uno menos, ja!) La realidad, es que algunos no nos conformamos con lo primero que vemos.

2 comentarios:

  1. Si te sirve de consuelo, ese pibe te hizo un favor! Subi una foto al blog, asi si lo cruzo en el subte lo empujo directo contra las vias

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  2. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

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