30.10.11

Crónicas de un 2011 a puro rock: Katy Perry

Decidí escribir sobre mis experiencias en recitales, algo que a mí, por lo menos, me da vida, me renueva y me recarga de energías. Para mi ir a un recital no es simplemente ir a escuchar buena música. No. Para mi es casi un ritual: desde la compra de las entradas, la ansiosa espera a que llegue la fecha, esa hermosa previa escuchando una y otra vez los temas del artista elegido, hasta la ida al estadio a respirar ese aire especial y a vivir una noche que recordaremos por el resto de nuestras vidas.

A lo largo de la mía, he ido a todos los recitales que quise y mi pasión se remonta a mis 9 años, cuando le rogaba a mi má para que me lleve a ver a los Backstreet Boys (tocaban en boca, allá por 1998) y a los Bee Gees (que tocaban por esos años). Como verán, siempre fui muy ecléctica.

Este año empecé con Katy Perry en el marco del Pepsi Music. ¿Cómo llegué ahí? Simple, no pagué por mi entrada. Así que me alisté a verla de inmediato, quería ver qué cuernos ocurría con ella. Fuimos con F., después de la jornada laboral a un lugar para nosotras muy conocido: GEBA.

27 de septiembre, 21hs. Hace cuánto que no me tomaba el 34, pensaba... Y mientras recorríamos los pasillos de GEBA, no paraban de acecharnos recuerdos de nuestras épocas clubberas. ¡Qué nostalgia!

Su público: teenagers y gays. De hecho, me preguntaba hasta qué punto las adolescentes entendían las metáforas sexuales implícitas en sus letras. Creo que si las entendieron, les importaba tres carajos, porque
TODOS enloquecieron cuando salió al escenario.

Lo que nos lleva a prestarle atención a su escenografía y vestuario. Era casi como un parque de diversiones, mezclado con tintes de "Alicia en el país de las maravillas", mucha purpurina, cupcakes, colores híper vivos y lentejuelas.

En fin, es divertidísimo ver a Katy Perry! Esta chica no solo es súper versátil en lo que respecta a su imagen, sino que suena muy lindo en vivo. Además de ser muy, pero muy graciosa. Tocó todo lo que tenía que tocar (tampoco es que tiene un gran repertorio), pero me dejó re conforme, con una sonrisa.

"La banco a Katy", esa fue nuestra conclusión. La bancamos porque es graciosa, simpática, canta bien, tiene un personaje bien construido, no copia a nadie y es una degenerada encubierta. La bancamos, también, porque usa todos los elementos más empalagosos del mundo (por ejemplo, los papelitos tenían forma de corazón y todo parecía un gran kiosko, lleno de azúcar) y, sin embargo, no empalaga, de hecho, tuve la sensación de que lleva todo eso hacia ese extremo quasi-empalagoso a propósito, para reírse de todos los clichés y, especialmente, de nosotros.

Genia.

Lista de canciones:
"Ur so gay"
"I kissed a girl"
"Firework"
"Hot n' cold"
"California girls"
"Teenage dreams"
"E.T"
"Peacock"
"Thinking of you"
"Hummingbird heartbeat"
"Waking up in Vegas"
"I want candy"
"Milkshake"
"Last friday night"

"Olé, olé, olé, oléeee, Katyyyy, Katyyyyy".

No hay comentarios.:

Publicar un comentario